Tuesday, June 23, 2015

¿Por qué obligar a la iglesia a casar homosexuales?

Siempre he defendido la igualdad en todas sus modalidades pero también me he manifestado por la liberdad de decidir de las personas incluso en el extremo de maltratos y vicios. Las decisiones son personales e incuestionables.

Si al caminar por la calle ves a una mujer que es golpeada por un hombre e intentas entrometerte y defenderla y, ella, te pide que la dejes pues obvio sigues tu camino y no deberías criticarla. Ella lo decidió así. Es su decisión vivir de esa manera.

Otro ejemplo ocurre con el pueblo talibán, donde las mujeres no pueden tocar a otro hombre que no sea su marido, ni aun siendo su hijo el que esté muribundo; tampoco se les permite ingresar a estadios o mostrar el rostro. Si la mujer no es obligada a cumplir esas reglas religiosas, debe respetarse su decisión.

La imposición de una idea o un modo de vida es tan reprobable como la censura.

En el caso de las leyes es distinto. El lunes pasado, entró en vigor en todo el país la determinación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que obliga a los jueces de paz a casar a las personas que así lo deseen, sin importar si son hombres o mujeres porque el precepto legal no debe sobreponerse al ideológico religioso, como es que el matrimonio es para preservar la especie.

En tiempos de la Revolución, las mujeres antes de entrar al lecho marital e iniciar el acto sexual, se arrodillaban y rezaban: "No es por vicio ni por fornicio, sino por darte un hijo a tu servicio." Les era negado el placer sexual, incluso era visto como algo vergonzoso. Esa imposición sí debe ser erradicada de la ideosincrasia porque impone una idea y no permite lo que podría llamarse "libre albedrío".

Tanto el catolicismo como cualquier otra corriente religiosa, busca promover la idea de un vida plena y feliz bajo ciertos lineamientos. También, promueve el acto sexual para procrear más "soldados" al servicio del señor que garantice y asegure sus ingresos monetarios.

En filosofía existe una teoría que considera la creación de las religiones como una forma de obtener el perdón que tanto busca el ser humano para escapar de su responsabilidad de decisión, a su libre albedrío. El hombre evade sus errores y le es impuesto el condicionamiento por el recibir perdón.

Ante tales hechos, a la comunidad lésbico-gay no debe importarle que la iglesia no los acepte ni quiera casarlos.

La ley reconoció su derecho terrenal, ese que únicamente es válido, porque los mandamientos y la fe cristiana no es ley de vida, como sí lo son las leyes. No pasa nada si un cura dice que viven en pecado, pero si ocurre algo muy malo si un juez no quiere casar a una pareja por estar conformada por personas del mismo sexo, ya sea gay, lesbiana, un transgénero, un heterosexual, bisexual o lo que sea paga impuestos, tiene derecho a decidir con quien vivir y dejar una herencia o una pensión.

Al morir alguno de los integrantes de la pareja, legalmente queda protegido si se casaron por "lo civil" y, en cambio, no pasa nada si muere sin haber recibido la bendición a tu matrimonio. La iglesia promueve la vida, la procreación. Las parejas gays o lésbicas no pueden procrear (salvo métodos científicos también censurados por la iglesia en todas sus modalidades).

Obligar a la iglesia mediante actos legales y discusiones en órganos como la Suprema Corte para que la iglesia católica (porque es a la única que se ataca y se olvidan de cristianos, mormones, evangelistas y tantas otras que son peores que los talibanes en su imposición de conductas) acepte y case a personas del mismo sexo es un absurdo. Es como si tu vecino hiciera una fiesta y solicitaras un amparo para que lo obligara a invitarte.

Legalmente, la comunidad LGBTT ha tenido importante logros y avances, pero intentar discutir con grupos religiosos es tanto como hablar al vacío. Su ideología es esa y debe ser respetada. Si desde el púlpito un cura rechaza la homosexualidad, en las calles (donde no puede rendirse culto) los gays deben seguir su vida. Pero si ese representante religioso promueve actos de violencia en contra de ciertos sectores, la situación es distinta y debe señalársele porque ellos tienen libertad de pensamiento, así como los homosexuales de follarse a quien así lo quiera.


Wednesday, October 08, 2014

Periodismo a la mexica. Televisa vs Todos

Durante décadas el periodismo ha sido sinónimo de corrupción, abusos y alianza con los gobiernos, empresarios y delincuentes. Nadie se salva de ese vínculo. Lamentablemente esta es una verdad irrefutable.

Antes, debías ser amigo de los priistas porque en cualquier momento uno de ellos podía ocupar un cargo ya fuera público o de elección popular  y, entonces, seguro mejoraría tus exclusivas, pero también tus ingresos. De igual manera se resguardaba la impunidad de los adláteres de la clase política.

La partidocracia en México cambió este “ejercicio perodístico”, lo condujo a una arena muy diferente pero igual de cuestionable. Sentó a los reporteros cómodamente detrás de un escritorio, de una computadora, de un teléfono celular y los obligó a recopilar e informar a través de boletines.

Las filtraciones, ahora como antaño, sólo las proporcionan los funcionarios a los reporteros cercanos a ellos, de los grandes medios de comunicación. Estas “grandes noticias” sólo se quedan, como siempre, en el mero escándalo mediático ese que sirve para deshacer al adversario del grupo en el poder o de los empresarios,

El poderío económico no sólo lo ejerce Emilio Azcárraga Jean, aunque sí es el que cuenta con más recursos y penetración entre la población. También hay otros medios como Radio Fórmula, Excélsior, Milenio, El Universal, La Jornada y el Reforma, nadie se salva de un vínculo con un grupo determinado. El principal cuestionamiento es que ninguno es capaz de admitirlo públicamente, intentan ocultarlo.

Recientemente, Azcárraga Jean se ha dedicado a destruir a todo aquel que aspira públicamente a una de las dos cadenas que serán concedidas por el gobierno en turno, gracias a la reforma en telecomunicaciones que impulsó Televisa en el Congreso. Años atrás, con la venta de Imevisión, que incluyó los canales 7 y 13, el ‘Tigrillo’ atacó a Ricardo Salinas Pliego hasta prácticamente desbancarlo en los niveles de audiencia, los más bajos que le impiden una buena comercialización.

En los meses recientes, la relación Azcárraga-Salinas ha sido tan buena que el primero vendió el 50 por ciento de sus acciones en Iusacell al segundo. Aunque Televisa ha sostenido la exclusividad y prohibición a sus “estrellas” de participar en programas de la televisora del Ajusco.

Los ataques del concesionario de la televisora de Chapultepec y sus actuales alianzas tienen su origen y motivo.

Carlos Slim, a la muerte de Emilio Azcárraga Milmo en 1997, apoyó a su heredero quien enfrentaba una crisis económica muy severa que lo obligó a eliminar exclusividades y acabar con la imagen de personajes muy cuestionables como Jacobo Zabludovsky y Raúl Velasco. La mejor manera de conseguir inyectar efectivo fue el Teletón que surgió dos años después, en 1999.

En el 2002, durante el sexenio foxista, Slim anunció a Azcárraga su retiro de la televisora porque su intención era contender por la licitación de televisión abierta que, desde aquellos días, se mencionaba. 'El Tigrillo' se sintió ofendido y, en venganza, vendió las acciones que dejaba el dueño de Telmex a su enemigo público número uno: Roberto Hernández, el empresario que siempre quiso adueñarse de la telefónica pero que Carlos Salinas dio al libanés.

Actualmente, Carlos Slim transmite sus noticieros a través de internet en UNO Tv. Ya no anuncia Telcel ni Sanborns ni ningún negocio en Televisa, pero Telmex sigue siendo "la empresa telefónica del Teletón". 

La intervención del Estado ha sido constante. La disputa entre ambos empresarios ha escalado a los máximos órganos de telecomunicaciones que llegó a calificar como preponderantes en su sector tanto a  Telmex, como a Televisa, por lo que les fueron establecidas reglas para su operación como la imposibilidad de adquirir en exclusiva la transmisión de eventos deportivos de la Selección Nacional de Fútbol, entre otros. En tanto Telmex deberá reducir sus tarifas y les fue eliminado el cobro por larga distancia.
Ambos consorcios deberán compartir su infraestructura a las empresas nuevas que pretendan ingresar al sector.

Durante el sexenio calderonista, Azcárraga también se enfrentó a la familia Garza Sada, quien buscó negociar con General Electric, de Estados Unidos, para hacerse de una tercera cadena en televisión. De inmediato los noticieros de Televisa y TV Azteca se unieron y presentaron una serie de supuestos reportajes que sólo buscaban desacreditar los negocios de los regios, quienes tienen el control total de la distribución de medicamentos en México.

Ante la oleada de ataques y la posibilidad de perder sus negocios, los norteños se retiraron de la competencia.

El siguiente blanco de las televisoras se llama Germán Larrea, el ecocida que explota minas y contamina ríos como el Bacanuchi y el Sonora pero que sólo un conflicto de interés sirvió de excusa para que Televisa decidiera despedirlo de su consejo y exhibirlo ante la opinión pública.

Durante décadas la empresa de Chapultepec encubrió a Larrea. Era intocable. Su intención de competir por la tercera o cuarta cadena de televisión que, según el actual gobierno se licitará próximamente, despertó al 'Tigrillo' quien lo exhibió públicamente en un extraño comunicado donde se reveló: “El Sr. Larrea pidió salir del Consejo de Administración de Televisa debido a los conflictos de interés que pudieran resultar de su participación en la licitación.”

Posteriormente, los empleados de Televisa propalaron en sus columnas y espacios noticiosos que Larrea llegó a la oficina de Azcárraga con una carta explicando los motivos que le permitían aspirar a contender por una licitación televisiva pero Azcárraga le respondió que la única carta que aceptaría sería la de su renuncia al consejo. Tal como ocurrió.

Ahora, Televisa ataca constantemente en sus noticieros al empresario minero por el ecocidio perpetrado en contra de los ríos Bacanuchi y Sonora. 

El nuevo blanco de Azcárra se llama Claudio X. González, quien “renunció al Consejo de Administración de Televisa para evitar un conflicto de intereses”, según informó el viernes 3 de octubre la televisora a la Bolsa Mexicana de Valores.

Monday, February 24, 2014

Periodìsticamente 'El Chapo'. Entre el rumor y la mentira.




La labor de un reportero es informar. La de un periodista, revelar, confirmar o desmentir un acontecimiento de interés público. Para conseguirlo se debe investigar, indagar, hurgar y obtener las pruebas para ser difundidas en los medios de comunicación y hacer público el hecho a exhibir públicamente.

El rumor para un periodista sólo debe ser utilizado como excusa para iniciar cualquier investigación pero jamás, sin excepción, puede escribir sin pruebas un reportaje, aunque en una nota sí es permitido el ‘se dice’ pero nunca abusar de este recurso porque se cae en el descrédito. Esa es la diferencia entre un profesional de la información y un lector que busca repuestas a lo escuchado en ‘radio pasillo’ en los medios impresos, electrónicos y cibernéticos.

En años recientes, el ciberespacio, específicamente las llamadas redes sociales, se convirtieron en una importante fuente generadora de rumores. Pero la labor periodística debe cumplir con las mismas características de revelación, confirmación o desmentido de publicado por esos medios, quizá más masivos aún que la televisión, la radio y mucho más que los diarios.

Como seres sociales, en su vida común un periodista también dispone del Facebook y el Twitter para difundir sus puntos de vista, opiniones o aquellos asuntos considerados trascendentales. De igual manera se convierte en una fuente de información siempre y cuando se cuente con el conocimiento necesario para sopesar y validar su veracidad.

Desconozco el porcentaje de la información difundida en Internet pero imagino que debe ser elevada, por tal motivo el periodista o reportero debe contar con el conocimiento si la cuenta, la página o el portal son fidedignos.




La detención de Joaquín Guzmán Loera despertó toda clase de sospechas. Debido a los abusos cometidos desde la Presidencia de la República casi desde la fundación del México actual, la población desconfía de todo aquello que informen sus gobiernos, de cualquiera de sus tres niveles. Lo mismo ocurre en el mundo, para muestra la muerte de Osama bin Laden o de Saddam Hussein y tantas historias.

En el caso del ‘Chapo’, y como ha ocurrido en tantos otros, los reporteros y periodistas equivocaron su labor informativa. Se fueron por el camino fácil del rumo, de la sospecha de la interpretación. Arrebataron de golpe esa estrategia a la gente ordinaria. Se volvieron ordinarios.

Un abogado debe demostrar la culpabilidad o inocencia de su cliente, según sea el caso. La de un periodista confirmar o desmentir. Al momento no he leído un solo reportaje que vaya más allá de lo informado por la autoridad, del recuento delictivo del capo más buscado o de ‘análisis’ sobre lo que ocurrirá con la caída del ‘Chapo’.

Aún más rumores ‘periodísticos’ señalan la poca coincidencia entre la persona con gorra y chamarra claras tomada previo a su fuga en enero del 2001 y las difundidas el pasado sábado. Pero ningún medio de comunicación ha buscado a especialistas criminólogos, médicos forenses o, incluso, cirujanos, para comparar una y otra imagen. Ni mucho menos nadie se ha tomado la molestia de contactar a quienes dicen ser sus hijos, buscar a sus familias.

¿Y luego nos quejamos porque hemos perdido fuentes de empleo, cuando leemos en los diarios lo mismo que te cuenta el bolero o la señora de la verdura?

En defensa de los periodistas también debo admitir la falta de recursos para realizar esta labor. Si uno vive en el DF es poco probable que te quieran destinar una importante suma para viajar, ya no de lujo sino modestamente, a Sinaloa durante una, dos semanas y ni pensar en un mes.

Pero ¿qué ocurre cuando un reportero ‘de fuente’ tiene frente a sí al funcionario? El representante del medio de comunicación se convierte en adulador, en ‘pone grabadora’ y olvida de su labor informativa. Esa  es la prensa, los reporteros y los periodistas que tenemos los mexicanos.

Un reportero no es aquel que sólo pone la grabadora, corre a su computadora, escribe la nota y la manda antes que la competencia. Un periodista no vive de comunicaciones ni de filtraciones, sino de la investigación.

Es necesario redescubrir nuestra labor dentro de la sociedad para que dejemos de ser llamados ‘vendidos’, ‘traidores’ o ‘mentirosos’.

Friday, February 21, 2014

¿Qué buscan Dish-MVS-Telmex-Televisa-TV Azteca?




En 1990, cuando el gobierno de Carlos Salinas dio la concesión de Telmex a Carlos Salinas, las condiciones de las telecomunicaciones eran muy distintas a las que ocurren 24 años después. En aquellos días era inexistente el llamado ‘triple play’ (teléfono, internet y televisión), por lo que su licencia no los contemplaba.

Resulta lógico que, en una economía de mercado, incluso las concesiones se adecúen a los tiempos, necesidades y avances tecnológicos. La duda que surge es ¿porqué los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón ni de Enrique Peña han cambiado el documento a Telmex para que ofrezca este servicio? La respuesta es simple. Televisa se niega a que así sea, no quiere competencia.

Carlos Slim se hizo del monopolio telefónico nacional de manera muy sospechosa. Lo mismo que Emilio Azcárraga Jean, y su padre y abuelo, han conservado beneficios hacendarios, han impuesto presidentes, hecho estrellas de televisión pero, sobre todo, dominan la mente del colectivo.

Si bien es cierto que el acuerdo entre MVS-Dish-Telmex no es sólo de facturación, como lo tratan de hacer ver, Carlos Slim no ha negado su intención de conseguir canales de televisión abierta, además de ofrecer este servicio privado.

Como comunicador, reportero y periodista considero indispensable abrir un nuevo espacio televisivo con lo que se mejoraría la competencia y se acabaría con el verdadero monopolio de Televisa, porque TV Azteca, de Ricardo Salinas Pliego, fracasó estrepitosamente y poco a poco se dirige a su quiebra financiera, porque de credibilidad ambas televisoras no tienen nada, al menos entre un importante sector.

Lo que resulta preocupante es que Slim, Azcárraga, Salinas y los Vargas se dediquen a desacreditarse pero no de manera directa. Para eso utilizan a sus empleados, lo mismo Joaquín López Dóriga que Javier Alatorre o Carmen Ariztegui. Estos personajes, cada uno a su estilo, dañan gravemente la imagen de los periodistas y exhiben con cinismo de lo que son capaces con tal de conservar su empleo y ‘poder’.

Ahora bien, la ley de telecomunicaciones obliga (sí obliga) a los cableros a ofrecer dentro de sus paquetes la señal de los canales de televisión abierta, ante lo cual surge la pregunta: “Si alguien contrata el servicio de paga ¿es porqué desea ver Televisa y TV Azteca?” Yo creo que no. Un espectador que suscribe un contrato con Cablevisión, Sky o Dish, o cualquiera otra, es porque desea un panorama más amplio.

Aunque es un ‘plus’ para el televidente contar con canales internacionales y los nacionales que, sin costo podrías ver aunque con una pésima calidad en la señal porque ¿no han notado que todos los canales de Televisa, TV Azteca y televisión pública se ven pésimos y se requiere un decodificador para mejorar la señal cuando antes era suficiente una antena aérea?

Otro asunto que debe tenerse en cuenta es que la autoridad competente, el Instituto Federal de Telecomunicaciones, no ha salido a calmar los ánimos entre los voraces empresarios. Les ha dejado paso libre, mientras la población sólo escucha sin comprender lo que ocurre y porqué discuten Slim-Azcárraga.

Por lo que considero necesario que los comisionados del IFT emitan una resolución pronta; que a Slim se le cambie el título concesión y que Azcárraga pague impuestos. Es lo mínimo que un ciudadano puedo exigir a quien ejerce el gobierno.

Thursday, October 17, 2013

Tras años de ausencia del blog, creo que es un buen momento para reactivarlo por lo limitado que resultan las otras redes sociales y la rapidez de lectura que exigen. Por tal motivo, rescato este espacio y comienzo a aflojar los dedos para aportar y recibir puntos de vista.

Aunque debo admitir mi desconocimiento a la frecuencia con la cual se consultan los blogs, pero no importa porque mi intención es realizar ese ejercicio de redacción que vincula ideas y escritura con el fin de expresarme y practicar la mejor forma de manifestarme a través de la palabra, principal valor (según yo) del ser humano.

Afirmo que la palabra tiene una calidad trascendental en el ser humano porque es lo único con lo que contamos. Más allá no hay nada. Por ejemplo, si no las sabes utilizar adecuadamente puedes perder una gran oportunidad de trabajo, amorosa o de amistad. Lo mismo pasaría en otras circunstancias que nos permiten interactuar.

Este es sólo el inicio, hay muchas ideas que comenzaron a flotar en mi mente, en cuanto decidí recuperar este blog, el cual permanecerá abierto para conversar e intercambiar ideas... Saludos cordiales.

Cvalda.

Friday, December 29, 2006

Propósitos...

Para este año que comienza, mis propósitos son:

1. Creer menos en la gente y más en el IFE;
2. Bañarme menos para ahorrar más el agua,
3. Comer menos, para generar menos basura,
4. Utilizar menos el auto, para evitar la contaminación,
5. Ser más estúpido, para entender a Adal Ramones,
6. Portarme más serio, para no quedar en ridículo,
7. Vestir bien, para ser invitado a más fiestas,
8. Aprender a ser romántico, para que me tomen en serio,
9. Ver menos cine y más televisión,
10 Llegar temprano a casa, aunque sea para dormir,
11 Compartir más con la familia, no importa si no lo disfruto,
12 Encontrar pareja, para no quedarme solo,
13 Buscar nuevas amistades, de las que tengo ya me sé sus vidas,
14 Ir a misa, quizá encuentre pareja,

Y, por último, no cumplir lo prometido...

Monday, November 20, 2006

Está bien. Faltó ser más explicito en la anterior colaboración. Pero intentaré ir por partes.

Lo que aplaudo de la Ley de Sociedades de Convivencia, es que dos personas puedan asegurar al menos la herencia material, porque la seguridad social es otro asunto muy distinto, igual que la adopción.

Primero, debemos ubicarnos en una sociedad tranza, pendiente siempre de sacar ventaja, amoral, ventajosa e ignorante. En el supuesto de que cualquier persona pudiera asegurar una pensión a otra, el abuso sería excesivo. Las aportaciones serían insuficientes y los hospitales y clínicas (de por sí de pésima calidad) estarían peor.

En segundo lugar, la adopción es un asunto muy delicado, sobre todo si sabemos que en el México actual, lleno de jotos insalubres y promiscuos, la relación de pareja aún no se ha consolidado. No existe aún un núcleo que pueda asegurar educación y sustento para los menores.

Los gays se enamoran hoy y se dejan mañana. Lo mismo ocurre con las heterosexuales, pero uno de los dos se hace responsable de los hijos y yo no creo que una pareja de homosexuales pueda asumir la responsabilidad.

¿Imaginas cuántos gays quisieran adoptar, pero cuántos están en esa posibilidad? Sobre todo si observamos que son personas extremadamente "reventadas" e inestable socialmente, porque aún no logran encontrar su espacio en el entorno.

Oh, bueno, esa sólo es mi idea.